Que poco queda de Las Ventas que aplaudían y ovacionaban cuando un torero se la jugaba a carta cabal como hoy ha hecho Damián Castaño en el quinto toro. Triunfo o enfermeria.

Ya en su primer toro ha estado muy asentado y muy por encima de su oponente, toreando muy despacio y el público de Las Ventas sin enterarse.

Pero en el quinto con uno de los toros o quizás el más duro de lo que llevamos de feria, uno de José Escolar que era un tío, pero un tío con mayúsculas, un toro que no regalaba ni una embestida, que en cada viaje el torero se jugaba las femorales, pues Madrid no lo ha visto o no ha querido verlo. Yo he visto un torero dando siempre el pecho, toreando de frente, cruzándose siempre al pitón contrario, con las zapatillas atornilladas en la arena y eso sí, sacando los naturales de uno en uno, pero qué naturales.

Y Madrid sin querer enterarse. Pues yo sí me he enterado y a mi hoy Damián Castaño me ha ganado, he visto a un torero que tiene sitio en cualquier feria.

Posdata.

Lo de José Escolar aparte de lo bien presentada que estaba la corrida poco que contar, toros de preciosa estampa, muy "asaltillada" pero muy desrazada, con mucho peligro sordo y con muy pocas opciones de triunfo

J-M-Quiros