¿Es la Casa Real? Claro, ¿pero estoy llamando a la Zarzuela, verdad? Eso es.... Que no me he confundido, señorita. ¿Está el Rey? Sí, el Rey.... Eso es, Juan Carlos. Pues que se ponga, señorita, si es tan amable.... Sí, ya sé que no es el modo correcto ni el cauce más adecuado, pero es que es lo que tenía más a mano. Él es Rey de todos los españoles, ¿no? Pues yo también soy español, oiga.... Vale, espero pues... ¿Majestad? Hola, ¿es usted? Verá Juan Carlos, es que estoy en Sevilla, he visto todo el ciclo de su Feria de Abril, porque hoy ya hemos terminado con una corrida de Miura muy interesante, y la verdad, Majestad, hemos echado de menos que usted, que creo que es el más aficionado de su familia, o algún otro miembro de su Casa no haya asistido a alguna corrida...

Sí, sí, ya sé que su madre era la más aficionada... Yo sé que le inculcó que como el arte de Curro, ninguno, pero que el Faraón se haya retirado de los ruedos no significa que se haya perdido emoción. En esta Feria, Juan Carlos, hemos vivido la competencia entre toreros como nunca. Es que verá, Majestad, sobre todo le llamo porque ha habido hasta once llenos hasta la bandera, todos apretaditos en la plaza, y como sabe, la Casa Real tiene reservado el Palco del Príncipe, que ha quedado todos los días vacíos, no vaya a ser que como sigan sin venir ningún día así tan seguido, le dé a la empresa Canorea-Valencia por poner a la venta el Palco del Príncipe, que ahí sonn capaces de meter a 100 personas más apretaditas; total, después de vender hasta los pasillos de las gradas, cualquier cosa es posible. Además, en estos momentos de auge palpable de la Fiesta no vendría mal su presencia en los toros. A ver si ahora en San Isidro, en Las Ventas, ya que su nueva nieta estará en casa y la familia más tranquila, nos acompaña algún día a los aficionados. Vale, Majestad. Un saludo también para usted. Gracias. Con Dios.

Francisco Mateos
29 abril 2007