Ha pasado ya una semana de la presentación de los carteles de la Temporada Taurina 2024 en nuestra Plaza Real, y parece que por fin la noticia, que corría por los mentideros taurinos, de que el Ayuntamiento con la colaboración de la Diputación quería organizar un festejo en el que actuaran los toreros portuenses en activo, por fin era cierta.

Bueno, cierta en un 50 %, ya que según el portal elpuertoactualidad.es, bajo un destructivo titular de “Daniel Crespo se niega a un mano a mano con Alejandro Morilla”, se afirma que con la mediación de Germán Beardo (Ilmo. Sr. Alcalde de la Ciudad de los Cien Palacios), la corrida era una realidad, pero ante la negativa a torearla del maestro Crespo todo ha quedado en nada, cosa que el Consistorio aún ni ha afirmado ni negado.

La fuente que a dicho medio le ha dado a conocer la noticia, le ha contado “de la misa la mitad”, ya que el cartel que se pretendía era de cuatro toros para Morilla y Crespo, y cuatro novillos para Barroso y Capdevila, como informé en mi anterior artículo de opinión titulado “Tauromaquia Portuense ¿Quo Vadis?”, no un mano a mano como se afirma en tan maléfico titular.

¿Quién y con qué propósito ha mal informado?, espero que no sea quien en lugar de admitir su error en “jugar a empresario” o incluso me atrevo a decir “jugar a apoderado”, si difícil es una cosa más complicada es la otra, le ha instado a mal escribir para “escurrir el bulto”.
Pongo la mano en el fuego en decir que Daniel Crespo no se ha negado a torear con Morilla, tan solo ha defendido estar acartelado en una corrida con figuras y contratado por Circuitos Taurinos, autentica empresa de la Plaza Real, cosa que se ganó el pasado año cortando cinco orejas, siendo triunfador y ganador del Premio de la Junta de Andalucía en la Provincia de Cádiz.

La opinión de los aficionados no me preocupa porque sé que ellos tampoco se han tragado dicha “trola”, pero como ya se ha dicho en varias ocasiones “cabemos en un autobús”. Los que verdaderamente me traen de cabeza y me irritan son los portuenses de a pie, especímenes que “de todo saben y de nada entienden” y que tienen como hobby “criticar por criticar”, estos sí que no caben ni en flota completa de Autocares Moreno.

Debido a mi reconocida afición a los toros, a que escribo sin seudónimo, y por mi trabajo en contacto directo con paisanos, solo escucho “¡Quillo no veas Crespo, que no quiere torear con Morilla!, ¿que se habrá creído ese?”, de verdad que los primeros días trataba de adoctrinarlos y desengañarlos, pero ya estoy harto de ejercer de Tom Cruise en “Misión Imposible”, últimamente me encojo de hombros y pienso “pobres ignorantes”. Que daño se le ha hecho a Daniel Crespo con tan mentirosa noticia, daño mucho mayor que el de no torear este año en El Puerto.

Sr. Pedro Payan, miento su nombre ya que usted es quien firma la noticia, otra vez deje el tema de la mano de su colaborador taurino, que firma bajo el seudónimo de “Alamares”, y dedíquese a sacar fotos de los actos para que él después ponga el “negro sobre blanco”. Y si me acepta un consejo, no intente mezclar nunca el Mundo de los Toros y la Política, ya que como indico en el titular de este artículo de opinión, son “agua y aceite”.

Ah, y espero ansiosamente la continuación a su desinformación, ya que para remate de su crónica afirma que “en otra ocasión tocará hablar de los novilleros… que tiene su capítulo aparte”.

Luis Angel Iñigo.