Noticias |
Luis Antonio Gaspar
Paulita y Cerezos dan una vuelta al ruedo en la segunda de feria de Teruel
10 Julio 2015Teruel. Tres toros -segundo, tercero y cuarto- de Partido de Resina, de preciosa lámina, pero en el límite de las fuerzas y de la casta; y otros tres -primero, quinto y sexto- de Los Maños, de buena presencia y también deslucidos. La plaza ha registrado alrededor de media entrada en los tendido
Eugenio de Mora, pitos y silencio.
Luis Antonio Gaspar "Paulita", vuelta al ruedo y ovación.
Sergio Cerezos, vuelta al ruedo y silencio.
Los diestros Luis Antonio Gaspar "Paulita" y Sergio Cerezos han dado una vuelta al ruedo cada uno en el segundo festejo de la Feria del Ángel de Teruel, en el que Eugenio de Mora se ha ido de vacío.
No ha empezado bien la tarde, con un primer toro muy reservón y a la defensiva, sin ningún ánimo de embestir, con el que Eugenio de Mora ha optado por abreviar, algo que no ha entendido parte del público, que ha pitado al torero al término de su labor.
En el cuarto, un toro flojo y muy apagado, ha hecho el esfuerzo De Mora a base de firmeza y de querer a toda costa, aunque tanta perseverancia no ha tenido eco en los tendidos, que acabaron silenciando su quehacer.
Paulita ha sorteado en primer lugar un toro que ha cumplido sobradamente en varas, lo que, sin embargo, ha condicionado que llegara a la muleta casi sin gasolina. El torero aragonés ha toreado con aplomo sobre el derecho, y ha sabido suplir a base de recursos la apatía final del astado, que ha acabado parándose.
El quinto ha tenido el depósito de la casta bajo mínimos, buscando siempre la huida, pero Paulita ha logrado sujetarlo en una faena de técnica y oficio, trufada, asimismo, con pasajes elegantes y estéticos, pero malograda a última hora con los aceros.
Cerezos ha estado tesonero con el manso y blandengue tercero, con el que ha tenido que sudar para lograr agua de un pozo prácticamente vacío, ya que el toro, muy blando, ha acabado también buscando el refugio de las tablas. Cerezos ha sido aparatosamente volteado al entrar a matar, quedando sin conocimiento, pero se repuso para dar la vuelta al ruedo.
El sexto fue un toro sin ninguna opción, con el que Cerezos ha estado voluntarioso, aunque sin poder armar faena.
EFE