Toros Notables
Entrega número 60 - (Caballero...Cabezón )
1. Caballero:
El día (28-09-1912), recibió la alternativa, en la históricamente efímera Plaza de Toros Monumental de Sevilla, José Gómez Ortega (Joselito o Gallito), de manos de su hermano Rafael el Gallo, convertido así en padrino de la ceremonia. El toro que su hermano le cedió se llamó Caballero, negro, cornicorto y terciado y era de la ganadería de don Rufino Moreno Santamaría, de Sevilla (*). Estuvo Joselito muy lucido, y en banderillas los dos hermanos hicieron primores. Una herida sufrida por Joselito aplazó el acto de su confirmación de alternativa en Madrid que estaba anunciado para el día (27-09-1912), pero la lluvia hizo que se suspendiera la misma y por ello tomó la alternativa primero en la Monumental y efímera plaza de Sevilla, donde estaba ya anunciada.
(*) Con divisa blanca y morada, y señal: una brincada en cada oreja y muesca en la izquierda, tiene antigüedad del (17-07-1875) y él presentó por primera vez sus toros en la plaza de Madrid el (24-06-1917). Fue adquirida por su abuelo don José Moreno Santa María, a don Francisco Gallardo, que la hubo de adquirir de don Carlos Conrado, y éste de don Rafael Laffitte. El origen es exactamente igual que las de González Nandín y Pablo Romero. En 1923 los señores Moreno Santa María compraron las mitad de sus reses a don Eduardo Campos Fuentes (la otra mitad la adquirió don Arcadio Albarrán), procedentes de Campos Varela y de casta Vistahermosa.
2.1 Cabezón:
El astado de la ganadería española de los señores Gutiérrez Gómez, que debutaron ese día en la Corte, llevó el nombre de Cabezón, fue lidiado en Madrid el (04-04-1869), llegando a tomar 15 varas (*) y a matar cinco caballos.
(*) Larga es la lista formada por los toros que aguantaron ese mismo número de varas. El primero del que históricamente se tiene noticia llevó el nombre de Beleto, era de don Juan G. Fuentes, fue lidiado el (12-06-1853) en Barcelona, mató seis caballos y, en una caída dislocó un brazo al picador Ceballos. El último de la relación se llamó Nazareno, de don Juan J. González Nandín, que fue lidiado en 1893 en la Real Maestranza de Caballería de Sevilla, en una corrida-concurso, originando varias caídas, matando seis caballos, obteniendo el primer premio. En total han sido 18 toros los que componen la lista, y desde 1893 ningún otro ha recibido 15 varas.
3. 2 Cabezón:
De don Anastasio Martín, corrido en Madrid el (17-05-1874), fue el toro, llamado Cabezón, que mandó a la enfermería a los picadores Benítez y Antonio Calderón y causó al matador José Machío una herida grave en el muslo derecho de ocho centímetros de profundidad. Cabezón, según Antonio Peña y Goñi, era astiblanco, porque tenía la mayor parte del cuerno blanco, siendo oscura la punta: «A José Machío le correspondió matar el tercer toro, llamado Cabezón, retinto, albardado, bragado, astiblanco y bien armado.» («Lagartijo y Frascuelo, y su tiempo.»)
4.3 Cabezón:
Vicente Pastor y Durán y Luis Freg, éste como sobresaliente, trabajaron el (14-01-1912), y el toro lidiado en cuarto lugar, llamado Cabezón, de la ganadería de Atenco, en corrida a beneficio del diestro madrileño Vicente Pastor, celebrada en el antiguo coso El Toreo de la Condesa (ciudad de México, D. F.), ocasión en la que iba a lidiar él solo seis señores toros de dicha divisa -azul, celeste y blanco-, que resultó bravísimo, llegó a la muleta con todo su poderío, hiriendo en la mano derecha a Pastor, al torearle de capa, lo que le impidió continuar la lidia. Luis Freg, que salió esa tarde de sobresaliente, como quedó citado, mató al citado astado, pero el quinto de la tarde, llamado Aventurero, le dio dos graves cornadas, junto al ano, de 10 centímetros de profundidad una y ocho la otra, quedándose el ruedo sin matadores. Juan Cecilio (Punteret) que estaba de espectador, bajó al redondel y, tras obtener el permiso de la autoridad, con gran pundonor liquidó al quinto y al sexto, por lo que fue ovacionado, así como a todos los toros que se lidiaron en esa corrida, que mataron un total de siete caballos (A.L.). Juan Cecilio (Punteret) que estaba de espectador en un tendido (*), bajó al redondel y, tras obtener el permiso de la autoridad, con gran pundonor liquidó al quinto y al sexto, por lo que fue ovacionado, así como a todos los toros que se lidiaron en esa corrida, que mataron un total de siete caballos (A.L.). Según otra crónica, el toro se llamó Cabezón, castaño y delantero de cuerna. En la temporada de 1995 se lidiaron en México solamente seis astados de Atenco, pero es un hecho digno de todo encomio que al cabo de los siglos esta sangre centenaria de bravo siga viva y su hierro vigente.
(*) Varios han sido los diestros que estando sentados en los tendidos tuvieron que bajar al ruedo, porque todos los diestros fueron heridos, a rematar los toros restantes de las corridas, o a morir. Citemos al menos tres ejemplos:
*El primer caso que recordamos lo protagonizó Manuel Corzo (Corcito) en la corrida en que actuaba Antonio Fuentes, el (31-07-1898) torearon Mancheguito y Dominguín, y fueron cogidos uno y otro por el primero y el segundo novillo, respectivamente. Corcito, que asistía a la corrida como espectador, solicitó a la presidencia permiso para rematar la corrida.
*El segundo caso lo protagonizó José Melo (Melito), banderillero de toros, que el (04-02-1907) acudió como espectador de la novillada que tradicionalmente se celebra en Valdemorillo (Madrid). El toro destinado a la muerte era grande y cornalón, además de manso. Melito, al observar las dificultades con que tropezaban los modestos banderilleros para cumplir su cometido, se bajó a la plaza y puso un par magnífico, saliendo cogido y volteado. He aquí cómo narró el percance Sol y Sombra: “El muchacho paró demasiado y el morlaco le trompicó, haciéndose con él y le lanzó a una altura considerable después le recogió en el suelo dos veces, entre la confusión y el pánico que es de suponer.” Trasladado a Madrid, falleció el (*07-02-1907). El astado le había inferido dos tremendas cornadas: una que le atravesada de parte a parte el muslo derecho y otra en un costado. Así acabó este buen banderillero, que había hecho concebir grandes esperanzas a la afición.
*El tercer caso lo protagonizaron Rodolfo Gaona y Joselito Flores, que alternaron en la Monumental Plaza de Toros de Barcelona la tarde del (03-06-1923), siendo testigo de la Luis Freg, que salió esa tarde de sobresaliente, mató al toro, pero el quinto de la tarde le dio una gran cornada en el recto -Cosío dice que fueron dos cornadas graves, junto al ano, de 10 centímetros de profundidad una y de ocho la otra-, quedándose el ruedo sin matadores. Juan Cecilio (Punteret) que estaba de espectador, bajó al redondel y, tras obtener el permiso de la autoridad, con gran pundonor liquidó al quinto y al sexto, por lo que fue ovacionado, así como a todos los toros que se lidiaron en esa corrida, que mataron un total de siete caballos (A.L.).
5. 4 Cabezón:
Entre las grandes faenas logradas en la “Plaza México”, a lo largo de la temporada 1999-2000, por el diestro español Alfredo Gutiérrez, debemos destacar: La que el 6 de febrero le hizo a Cabezón, de la ganadería mexicana de Xajay –con divisa: Verde y grana, debutó el (16-08-1925), en la Monumental plaza México-, , al que le cortó las orejas (Addiel Bolio, La Afición, (12-02-2000); la de la tarde del (21-11-1999), a Canónigo, de la ganadería mexicana de De Santiago, al que le cortó las orejas. El matador albaceteño empezó su labor de convencimiento ante la afición mexicana para adueñarse de su preferencia, con la faena que le instrumentó a Clío, de la ganadería mexicana de don Rodrigo Aguirre, al que le cortó un apéndice, y siguió el (16-01-2000) con otra estupenda faena a Milenario, de la ganadería mexicana de Soltepec, de Reyes Huerta, al que le tumbó las dos orejas.